Durante su recorrido por el Fraccionamiento La Florida, el Dr. Manuel Alonso, candidato del PRI a la presidencia municipal de Poza Rica, atendió de inmediato un caso que refleja una problemática social muchas veces ignorada, el maltrato animal.
Bajo el intenso calor, una mascota permanecía en condiciones inadecuadas, sin sombra ni acceso visible a agua.
Al percatarse de la situación, el equipo del candidato entabló diálogo con los propietarios para sensibilizarlos, y se dio paso al contacto con colectivos protectores de animales para proponer soluciones.
El Dr. Alonso subrayó que esta situación no es un hecho aislado, sino parte de una problemática más amplia que también afecta directamente la salud pública.
“El maltrato y abandono de animales no solo es un reflejo de deshumanización, también genera riesgos sanitarios. Tenemos que atenderlo de raíz”, enfatizó.
Entre sus propuestas, destacó la restauración del albergue municipal de animales, que actualmente se encuentra en condiciones precarias.
Este espacio tendría un papel clave en la atención de casos de abandono, así como en campañas de adopción responsable.
Para evitar la sobrepoblación, se pondrán en marcha campañas permanentes de esterilización tanto para animales callejeros como para mascotas, acompañadas de convenios con veterinarios para garantizar esquemas de vacunación que ayuden a prevenir enfermedades zoonóticas.
Una medida crucial será la creación de un Registro Municipal de Mascotas, obligatorio y gratuito.
Este sistema permitirá identificar a cada animal con información sobre su dueño, vacunas aplicadas, esterilización y otras características.
Esto no solo promueve la tenencia responsable, sino que facilitará acciones rápidas ante situaciones de extravío o riesgo sanitario.
Además, el Dr. Alonso propone llevar programas de educación y concientización a escuelas y colonias para fomentar el respeto y cuidado de los animales como parte de una cultura ciudadana más empática y saludable.
También buscará la colaboración con asociaciones civiles para establecer estaciones controladas de alimento y agua para animales callejeros, ayudando así a reducir comportamientos agresivos y posibles focos de infección.
“Sanar Poza Rica también implica cuidar nuestra relación con los animales. Porque donde hay respeto y salud para ellos, también la hay para nuestras familias”, concluyó.
